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domingo, 10 de abril de 2011
EL AGUA DE MAR Y RENÉ QUINTON
El conocimiento de los beneficios del agua del mar para la salud y para la nutrición no es cosa de los últimos años sino que se basan en la investigación del científico francés René Quinton (1866 – 1925). Descubramos esta figura no suficientemente conocida:
QUINTON vs PASTEUR.
Quinton postuló que la vida se originó en el mar y que cada cuerpo humano es un pequeño océano (somos en un 70% agua de mar) donde están suspendidas nuestras células. Si este océano interior se mantiene en sus condiciones físicas (pH, salinidad, temperatura…) óptimas, el cuerpo se mantiene en un estado de equilibrio natural. Y si venimos del mar, ¿qué mejor para renovar a nuestros líquidos internos que el agua del mar?
Esta concepción holística, donde se trata la persona como un todo chocaba con el posicionamiento de Pasteur que a partir de las vacunas planteaba atacar a unos microorganismos concretos perjudiciales. Según Quinton, si el cuerpo recibía los beneficios del agua del mar, conseguía un equilibrio que hacía muy difícil el desarrollo de agentes patógenos.
EXPERIMENTOS ASOMBROSOS
Quinton fomentó sus teorías con experimentos sorprendentes con perros callejeros. En 1897, en el Laboratorio de Fisiología i patología de estudios Superiores del Colegio de Francia, sustituyó toda la sangre de un perro por agua de mar diluida con agua mineral. En pocos días, el organismo del perro volvió a reproducir glóbulos rojos y plaquetas que tomaron el agua de mar como plasma. El reto siguiente era aplicar estos beneficios al hombre.
EL AGUA MILAGROSA
El empeño de Quinton para difundir sus investigaciones le impulsó a construir centros denominados “dispensarios marinos” que proporcionaban inyecciones de agua de mar isotónica (rebajada con agua mineral) a personas con problemas de salud, muchas moribundas. El agua de mar salvó la vida a miles de personas en los comienzos del siglo XX, aportando nutrientes y sanando a multitud de enfermos de dolencias varias como la desnutrición, el tifus, el cólera, la tuberculosis, la diarrea… Hasta el ejército francés empleó agua de mar como plasma para compensar la pérdida de sangre de los heridos en combate durante la Primera Guerra Mundial.
La recuperación casi milagrosa de niños y mayores que antes del tratamiento se daban por muertos hizo que se construyeran dispensarios marinos en París, Montpellier, Lyon, Londres y Egipto y hubo varios hospitales que se adhirieron al método marino en Estados Unidos, Italia, Suiza, Bélgica, Holanda y Argelia
A partir del 1903, el uso del plasma marino de Quinton se reconoció por la sanidad francesa que la usa hasta el año 1982. Hasta el ministerio francés se planteó implantar de forma obligatoria la aplicación de agua de mar a todos los niños en edad escolar.
¿OLVIDO O SILENCIAMIENTO?
Las aplicaciones del agua del mar en las personas cayó en el olvido tras la muerte de René Quinton. Se especula que los prejucios por el hecho que no fuera médico y, sobre todo, el interés del sector farmacéutico por silenciar los grandes beneficios de un elemento gratuito como el agua que va en contra de sus intereses de negocio han ocultado y minimizado la aportación que René Quintón hizo a la humanidad.
Os facilitamos algunos enlaces para ampliar la información sobre René Quinton y su legado:
- Power point: “El agua del mar: un plasma marino al alcance de todos” .
- Power point: “René Quinton: un sabio en el olvido”.
- Aqua Maris: Cronología sobre los beneficios del agua de mar al largo de la historia, de las investigaciones de René Quinton y sus seguidores.
En este artículo de Mesiento.com podéis ver las acciones que están emprendiendo algunos investigadores siguiendo el legado de René Quinton para aprovechar el agua para la salud, como nutriente y en la agricultura.
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